Los pueblos indígenas representan menos del 5 por ciento de la población mundial, pero protegen alrededor del 80 por ciento de la biodiversidad que queda en el planeta. Australia tiene una de las tasas de pérdida de biodiversidad más altas del mundo, los lugares salvajes están sufriendo cambios, así como el cambio climático.

Arnhem Land, en el norte de Australia, es una de las regiones con mayor riqueza cultural y biodiversidad de Australia. En la segunda mitad del siglo XX, una alteración en la gestión de las tierras indígenas provocó una caída en picado del número de mamíferos nativos, incluidas especies de gran importancia, y la reducción de las zonas de selva tropical.

Afortunadamente, un movimiento comenzó a alentar a los pueblos indígenas a regresar a sus tierras. Hoy en día, las guardabosques indígenas, que viven y trabajan en el país, son las que luchan para frenar la pérdida de biodiversidad y mejorar los hábitats para las generaciones futuras.

Las mujeres indígenas guardabosques de Arnhem cuidan la tierra de la zona utilizando conocimientos ecológicos indígenas precisos y tecnología moderna de vanguardia. La participación de las mujeres está dando buenos resultados en la conservación de las tierras.

Ellas son responsables de:

• Proteger la biodiversidad nativa y reducir la frecuencia e intensidad de los incendios forestales
• Seguimiento de animales salvajes
• Eliminación de plantas invasoras
• Seguimiento y monitoreo de especies amenazadas.

Debido al tamaño y lejanía de las zonas en las que trabajan, NUII ha patrocinado la compra de un nuevo vehículo 4×4 para apoyar su trabajo.